domingo, 13 de noviembre de 2011

¡Me arme de valor para decir adiós temor!

Ahora tengo fuerzas, coraje y valentía para
armarme de valor y escribir estas líneas
para decirte:

¿Que hiciste con mi vida y con mi amor?
Que solo le causaste angustia
y dolor.

Durante mucho tiempo soporte tu burla,
tu falta de control, tus deseos y tus celos,
permanecí en la calma y en el silencio
en medio del temor con el solo hecho que
valoraras a mi noble corazón
que solo te brindo
su amor.

¿Creíste que siempre iba soportar y que
esto iba a durar mientras tu te ibas a
burlar?

Pues déjame decirte que todo tiene un
limite y por eso es que decidí acabar
con esta perturbación porque necesito darle
mucha paz a mi cuerpo y que ya nada
lastime a mi mente
y a mi razón.

Ahora que llegó la hora de mi partida te
suplico que cuides y valores el bello recuerdo
que dejo en tu mente y en tu memoria, para
que tu cuerpo y energías tengan abundante vida
y les des el respeto y la libertad que nunca
me supiste dar por puro orgullo, soberbia 
y vanidad.

Te di lo que nadie te podrá dar y espero
que algún día lo sepas
valorar.

Se que nunca más nadie te podrá amar
como yo te supe amar porque cada uno
tiene su única forma
de amar.

Y te pido el único y ultimo favor después
que leas esta carta quémala para que las
cenizas echen a volar y también sean libres
como yo para valorar a alguien que si sepa
lo que es verdaderamente
amar.