jueves, 6 de enero de 2011

“La Unión, la Verdad, el Amor y la Vida son los cuatro poderes del mundo”

Cuenta la historia que hubo un crucero donde se encontraban muchas personas de diferentes creencias entre ellas las más dominantes: La religión, la política, la ciencia y la justicia. Estos se encontraban en viaje de placer cuando entraron en discusión y debate sobre sus creencias, cuando en ese momento se escucharon gritos, ya que había pánico porque el crucero chocó contra una roca gigante y se iba a hundir y solo habían unos cuantos botes para salvar a un grupo de personas.
Los cuatro falsos poderes de este mundo se acercaron al capitán del crucero.
 La religión dijo: Somos representantes de Dios y tenemos que ser salvados nosotros con nuestra familia y estar vivos para orar a Dios para que aplaque su ira y rescatar a todos los pecadores de este mundo.
La política dijo: Somos los mejores gobernantes y tenemos que ser salvados nosotros con nuestra familia porque tenemos bajo nuestra responsabilidad seguir ayudando a mucha gente en este mundo.  
La ciencia dijo: Somos la mejor ciencia, tenemos que ser salvados nosotros con nuestra familia, porque le hacemos mucha falta al mundo para que con nuestra sabiduría sigamos hallando soluciones para evitar estas clases de tragedias en este mundo.
La justicia dijo: Somos la justicia más valiente del mundo y tenemos que ser salvados nosotros con nuestra familia para proteger a nuestras naciones y seguir defendiéndolos en este mundo.
Las mujeres, adolescentes y jóvenes incluyendo la familia de ellos, que habían escuchado  todo lo que hablaron estos falsos poderes estaban indignados por el egoísmo de estos y conversaron entre ellos y una mujer se paró encima de una mesa y dijo en voz alta: “Capitán” hoy UD. Representara al Amor de Dios y tomara una justa decisión, como el lo haría, le pedimos que tome la correcta y salve a todos los niños y a los adolescentes, porque son el futuro del planeta y serán los nuevos gobernantes que ayudaran a salvar al mundo; porque hoy todos hemos abierto nuestro entendimiento y nos damos cuenta que por la culpa de esta gente egoísta, pasan estas desgracias, ya que solo les importa sus propios intereses;  todo este tiempo nos llenaron de temor diciendo que Dios castigaba y eso es mentira, porque estos se creyeron dioses y a base de miedo, amenazas, chantajes, extorsión y falsas promesas llenaron nuestra mente de pura basura, confiamos neciamente en esta gente, hemos sido esclavos de ellos y hemos hecho lo mismo que ellos con todo el mundo por cobardía y temor; y peor aun nos hemos apartado del Amor de Dios y por eso nosotros los adultos con nuestras malas acciones, vamos a hundir al mundo igual como lo hemos hecho con  este crucero.
Avergonzados estos cuatro falsos poderes y toda la gente que se encontraba en el crucero con lágrimas en los ojos aplaudieron a esta noble mujer y aceptaron humildemente y en silencio la orden del capitán.
El capitán con todo su personal llenaron los botes con todas las mujeres, niños y adolescentes.
Todas las personas que se quedaron en el crucero se abrazaron y se pidieron perdón los unos a los otros, se arrodillaron y pidieron perdón a Dios por su egoísmo, soberbia, orgullo y vanidad, agarrados de la mano oraban a Dios que a partir de ese momento todos  iban a cambiar sus vidas, que confiaban en él,  que enviaría a sus Ángeles y vendrían pronto a rescatarlos.
Mujeres, niños, adolescentes todos juntos, unidos remaron y llegaron hasta el lugar de rescate, bajaron de los botes y pidieron ayuda para que fuesen a rescatar a todas las personas que se encontraban en el crucero, en ese momento enviaron muchos helicópteros y todos fueron rescatados e incluso el crucero también fue rescatado por el Amor misericordioso de Dios.
Y todas estas personas que fueron rescatadas del crucero, hasta el día de hoy siguen siendo los “Ángeles, Guerreros Unidos al Amor, a la Verdad y a la Vida” que ayudan, consuelan, cuidan, protegen y defienden al mundo en armonía con el Universo, los cuerpos celestiales y la Madre Naturaleza.