sábado, 12 de marzo de 2011

“Todo lo que sucede en nuestro entorno, de igual forma sucede dentro del cuerpo”

Dios jamás castigó, ni castiga, ni castigará, porque el  "Amor es Dios" y "Dios es Amor, misericordia y paciencia" que nos dio libre albedrío a todos, para que seamos responsables de nuestras energías, emociones, sentimientos, pensamientos y acciones, que lamentablemente, nadie las supo cuidar y diariamente las abortan, con sus acciones erróneas.
Todo lo que esta sucediendo en este mundo, es causa de todos los errores del ser humano. Porque la mayoría de la gente, es necia y dura de entender, que todo lo que comen, se transforma en energía, emociones, sentimientos, pensamientos y acciones.
La palabra tiene poder y debemos emplearla, para bendecir, bien decir, decir bien, hablar bien y de ello depende actuar bien.
Orar es hablar! Empecemos por pedir perdón, a todos los animales, que de alguna forma, consciente e inconscientemente, participaron de la muerte de ellos y frustraron su evolución, ya que ellos al morir fueron transformados, en virus, bacterias, parásitos y hongos oportunistas, que entran a los cuerpos y a la mente, a generar energías vengativas y revanchistas, para que se auto eliminen los unos a los otros. Y esas energías son transformadas en terremotos, maremotos, tornados, huracanes, etc. Y su venganza es implacable.
"todo regresa como un boomerang", "lo que se siembra se cosecha" y "todo lo que se dice o se da de igual forma se recibe".
"La materia y la energía ni se crea ni se destruye solo se transforma".
A muchos les parecerá locura lo que leen. Esa es la verdad ya que todos somos materia y energía. 
La solución esta en pedir perdón, a sus cuerpos y a su sistema inmunológico, ya que por meter cadáveres de animales, han sido los primeros en sufrir todas las consecuencias y por ello todo eso se esta manifestando en enfermedades, tragedias y desastres dentro del cuerpo. Ya que todo lo que sucede dentro del cuerpo, también sucede en nuestro entorno.
Valoren, amen, cuiden, protejan y denle paz a sus cuerpos, porque son templos, reino de los cielos, que están interconectados a la Santísima Trinidad, Amor, verdad y Vida,  Padre del Universo, a los Cuerpos Celestiales y a la Madre Naturaleza  y ellos les darán la paz, que el planeta hoy necesita.
Dios dice: Cuídate que te cuidare.
Perdónense los unos a los otros. Pidan perdón y agradezcan a los árboles y plantas, que son nuestros hermanos mayores, que se sacrifican diariamente dándonos oxigeno y sus frutos, para darnos vida en abundancia.
Pidan perdón a toda especie de animalitos, que son nuestros hermanitos menores y que por ignorancia fueron cómplices de su muerte y transformación.
Y a partir de ahora, dejen de ser cómplices, de tanta transformación, para que esas energías revanchistas, dejen de tomar venganza, contra culpables e inocentes.
¡Tomen conciencia y reflexionen! ¡Renuévense de Amor!