Había una familia millonaria, que eran muy religiosos, tenían cadenas de restaurantes de comida de carne de animales, tiendas de pieles, artículos de cuero y tiendas de muebles de madera. El hombre se llamaba Ambición, la esposa se llamaba Consentir y tenían dos hijos varones, el primero llamado Apego, el segundo Vicio y una hija mujer, llamada Obsesión. Ambición era cazador de animales, y tenía en su sala como trofeos las cabezas, de diversos animales entre ellos: venados, elefantes, leones, osos, etc. Y él administraba los restaurantes, Consentir con su hija Obsesión, administraba las tiendas de pieles y artículos de cuero, Apego y Vicio administraban las tiendas de muebles de madera. Obsesión se casó y tuvo dos hijos. Un cierto día, en la casa de Obsesión, mientras dormían, hubo un corto circuito y se incendió toda la casa, el esposo de Obsesión logró sacarla a ella y entró a casa, a sacar a sus dos hijos y nunca pudo salir y murió con ellos calcinados. Obsesión tuvo quemaduras leves y fue internada urgente en una clínica psiquiátrica, porque se había trastornado de la impresión. Consentir tenia sobrepeso, al saber la noticia sufrió un paro cardiaco y cayó en coma y también fue internada en una clínica. El hijo mayor Apego, era alcohólico social y poco a poco, se volvió un alcohólico crónico y también fue internado en un centro de rehabilitación para alcohólicos. Vicio era adicto a las drogas y al saber el estado de su madre y sus hermanos empezó a consumir heroína y tuvo una sobredosis, que lo llevo a la muerte y fue enterrado. Ambición era diabético y muy obeso, al ver a su esposa e hijos internados y enterrar a su hijo muerto, le dio compulsión, por comer en demasía y su peso había aumentando mucho. Uno de sus empleados de confianza, al saber lo que había sucedido con sus patrones, decidió buscar ayuda para su patrón, que había sido afectado psicológicamente y había descuidado todos sus negocios. Una sobrina del empleado conocía a un Psicoterapeuta-Bioenergético y ambos le contaron lo sucedido con sus patrones. El buen empleado conversó con su patrón y le dijo: Patroncito Ud. Necesita ayuda de un Psicoterapeuta y le pedí a mi sobrina que lo trajera y hoy vendrá a verlo. Ambición había subido demasiado de peso, ya no caminaba, estaba encerrado y postrado en su cama muy deprimido. El Psicoterapeuta llegó y vio en la sala los trofeos de cabezas de animales y se quedó muy sorprendido, de tanta muerte de seres inocentes. El empleado lo llevó a la habitación de Ambición y lo presentó. Ambición le dijo: He perdido la fe en dios, porque el abandonó a mi familia y a mí, a pesar que yo fui muy fiel a su iglesia, el Psicoterapeuta le respondió: Por favor jamás pierda la Fe en Dios, porque el jamás abandona a sus hijos, los que nos apartamos y lo abandonamos, somos nosotros, por nuestra ingratitud, soberbia, necedad, rebeldía y falta de conocimiento. Es muy lamentable lo que le ha sucedido, le voy a dar la explicación de lo que esta sucediendo con su familia y Ud. He visto en su sala muchas cabezas de animales, su empleado me contó que Ud. fue cazador de animales y los mataba, para hacer sus negocios de restaurantes, pieles y mandó a talar árboles, para hacer su negocio de muebles. Ambición le contestó: ¡Si! eso es verdad lo hice por deporte y para tener mis negocios, pero que tiene que ver eso con todas las tragedias, que le pasó a mi familia y a mí. El Psicoterapeuta le dijo: Precisamente de ahí viene la causa, del efecto que les ha sucedido a uds. Ambición dijo: ¿No entiendo lo que me quiere decir? El Psicoterapeuta dijo: Por falta de conocimiento espiritual y energético, Ud. como mucha gente, ignoran que nuestra lucha diaria, es con energías o almas de estos inocentes animales, que al ser cruelmente asesinados, sus cuerpos son transformados, en microorganismos oportunistas: virus, bacterias, parásitos, hongos, etc. Estos por revancha y por venganza entran al cuerpo humano de culpables e nocentes, para generar malas energías y producir mil enfermedades físicas y desordenes mentales. Peor aun estas energías negativas, son transformadas en fenómenos sobre naturales, cortocircuitos, incendios, terremotos, maremotos, tornados, huracanes, etc. Para hacer sufrir y extinguir a todos los humanos depredadores, que se comportaron como bestias irracionales, con ellos. Como dice el refrán: “ojo por ojo diente por diente” o el refrán “lo que se siembra se cosecha”. Ambición sorprendido de lo que escuchaba preguntó: ¿Por que los sacerdotes en mi religión y en la Biblia , siempre dijeron que dios manda pruebas y castiga con tragedias y desastres? El psicoterapeuta respondió: “El Amor es Dios y Dios es Amor” El jamás manda pruebas, ni castigó ni castigara a nadie, porque nos dio libertad, para que decidamos voluntariamente, que hacer con nuestro libre albedrío. La Biblia cuando fue transcrita, fue quebrantada e invalidada, por gente ambiciosa y cambio la verdad, por palabras distorsionadas, ya que solo les importaba su propia conveniencia. Yo también leo la Biblia y procuro retener todo lo bueno y lo demás lo descartó. Le voy a contar, porque me volví Psicoterapeuta Bioenergético: Hace muchos años, perdí año a año, a mi madre, a mis hermanos, a mi esposa y a mis hijos con muertes muy trágicas, me quede sólo y al poco tiempo, me detectaron un tumor maligno, en la cabeza, me desahuciaron y solo me dieron seis meses de vida. Estuve internado por neutropenia en un centro oncológico y ahí tuve la oportunidad de conocer una mujer, que era Psicoterapeuta bioenergética. Ella me dijo todo lo que hoy le he dicho y me arrepentí de corazón, por todo el mal que hice a todos los animales, que son nuestros hermanos menores y a muchas personas inocentes, ya que yo fui médico interno y fui cómplice del asesinato de personas y animales. Hice el juramento de Hipócrates, pero resulte ser un hipócrita, ya que por ambición engañe a mucha gente diciéndoles, que podían comer carnes de animales, que tenían vitaminas, proteínas y minerales y todo eso era mentira, porque como medico que soy, ya que estudie anatomía, biología, bioquímica, inmunológica, microbiología, semiología, patología, etc. soy consciente que toda especie cadáveres de animales no sirven como alimento, porque es transformada en carne podrida y esa toxinas van al intestino y estos microorganismos oportunistas, son muy astutos, para pasar a la sangre y contaminar al sistema inmunológico. Es mas fui cómplice y participe de la muerte de muchos pacientes, que solo fueron con un simple cólico, le engañábamos que era el apéndice o la vesícula y que tenia que operarse urgente, le sacábamos análisis, para ver el estado de su sangre, su liquido encéfalo raquídeo y de sus órganos, y en plena operación le aplicábamos una inyección, para paralizar sus signos vitales y les decíamos a sus familiares, que habían muerto de un paro cardiaco e inmediatamente lo enviábamos a la morgue, para que lo abrieran, como se abre el cuerpo de un animal y le sacaran la sangre, el liquido encéfalo raquídeo, las corneas y los órganos para venderlos y nos repartíamos entre todos el dinero. Ambición dijo: eso quiere decir, que yo también soy un asesino, de nuestros hermanos menores, El Psicoterapeuta dijo: ¡Así es! Por eso ellos se están vengando de ud. Y provocaron todo lo sucedido a su familia. Cuando yo escuché a esta buena mujer, que los árboles, las plantas son nuestros hermanos mayores, que nos dan gratuitamente el oxigeno y sus frutos, para darnos vida en abundancia y que toda especie de animalitos, son nuestros hermanos menores, que generan energías para ayudar al planeta, y por ello es que debemos respetar la vida de todos, para evitar que sean transformados, en energías revanchistas y vengativas, comprendí que por culpa de mis errores toda mi familia, pagó las consecuencias y por ello murieron y yo fui el ultimo que quedaba y sufrí los peores dolores de cáncer, porque el tumor maligno que tuve en la cabeza, se generalizó en todo mi cuerpo. Fue así, que apareció esta gran mujer, que para mi fue un Ángel de Dios, ya que el mismo día, fui sanado del cáncer generalizado. Ambición con lágrimas en los ojos dijo: Yo también estoy arrepentido, de todo el mal que hice, a todos los animalitos y árboles y les pido perdón por mi ignorancia. Necesito que Dios y ellos me perdonen y me ayuden a sanarme, para ir ayudar a mi única familia, que tengo y están internados en distintas clínicas. El Psicoterapeuta, lo abrazó muy fuerte y en cuestión de segundos, Ambición se deshincho, de la obesidad. El lloraba de emoción y pidió perdón a Dios y a los animalitos, que habían muerto y habían sido transformados, por su causa. Ese mismo día, Ambición con la ayuda, del Psicoterapeuta bioenergético y con todos sus empleados, enterraron las cabezas de todo los animalitos, que los tuvo como trofeo. Luego fueron a ver su esposa y salio del coma y sus dos hijos también fueron sanados. Ambición agradeció al Psicoterapeuta Bioenergético, a quien le quiso dar mucho dinero y El le dijo: Yo recibí de Dios gratis mi sanidad, e igual, El lo sanó a Ud. y a su familia, por medio de mi cuerpo, que es su Verdad, su templo santo y un reino de los cielos. El mejor pago que puede darle a Dios y a todos los animalitos que ahora descansan en paz, porque ahora son libres, son buenas energías, ángeles y lo van ayudar y proteger, para que Ud. también acepte ser un Psicoterapeuta Bioenergético de Dios y oriente a muchas personas, a conocer esta verdad, para que también se arrepientan, de todo el mal que hacen, por ignorancia y falta de conocimiento espiritual y energético, Ambición dijo: prometo a Dios, a Ud. que también es un ángel, a mis hermanos mayores y a mis hermanos menores que mi familia y yo seremos como Ud. “Guerreros del Amor, la Verdad y la Vida de Dios”. El Psicoterapeuta Bioenergético se despidió y se fue. Fue así como Ambición y su familia, se volvieron vegetarianos naturistas y Psicoterapeutas Bioenergéticos, cerraron sus tiendas de pieles, cueros y muebles y se quedaron con sus cadenas de restaurantes, que fueron cambiados de rubro y son hasta el día de hoy “Restaurantes Vegetarianos y Clínicas Psicoterapéuticas Bioenergéticas gratuitas”.
