Un cierto día la mamá venado se encontraba con sus venaditos paseando por la selva y encontró un puma bebe que estaba moribundo de hambre y sed. La mamá venado se lo llevo a su hábitat con los demás venados, e hicieron una reunión y todos ellos se opusieron que se quedara ahí. La mamá venado le dio mucha lástima e hizo caso omiso y se lo llevo a su casa. La autoridad de los venados le dijo: Recuerda que los pumas son salvajes y pueden llegar a lastimarnos a todos, obedéceme y déjalo donde lo encontraste. La mamá venado respondió: Digan lo que digan nunca abandonaré a un bebe así sea de la especie salvaje, yo le adoptare y pertenecerá a mi familia. Pasado el tiempo el puma creció, era herbívoro y tan humilde como los venados, se amaban se cuidaban y se ayudaban en todo. La autoridad de los venados le dijo a la mamá venado que el puma ya era adulto y tenía que irse, porque era muy peligroso convivir con él y si no se iban a tener que ir toda su familia del hábitat. El puma escuchó lo que le dijeron a su mamá, se acerco y llorando le dijo al venado: Dejen a mi familia tranquilos, en este momento yo me iré sólo. La mamá venado y sus hijos lo abrazaron y lloraron por la partida del puma. El puma salió del hábitat de los venados y se enfrentó a un nuevo mundo de salvajes. Los pumas lo aceptaron con ellos, contó quienes le habían criado y quien lo había desterrado, los pumas salvajes le dijeron que ellos le iban ayudar a vengarse de los venados por haberlo votado. El puma herbívoro les dijo: Soy de la especie de uds. Pero jamás le haré ningún daño a los que me criaron ni a los que me votaron, porque gracias a ellos tengo vida y amor. Los pumas salvajes se rieron de él y les dijo: ¿Y que es amor para ti? El puma respondió: Amor es: bondad, afecto, brindar cariño, alimentos sanos, cuidar, consolar, defender, ayudar sin condiciones, y eso es lo que hicieron mi familia conmigo y eso mismo haré con Uds. Ya que ahora son mi familia. Los pumas salvajes les dijo: ¿De que valió que te criaran si te votaron? El puma respondió: Claro que tiene mucho valor porque estoy vivo, soy humilde y ahora puedo defenderme por si sólo en esta selva y es más les enseñare a respetar la vida de todos nuestros hermanos herbívoros, ya que gracias a mi familia aprendí a agradecer y a respetar a nuestros hermanos mayores que son los árboles y plantas que nos alimenta incondicionalmente con sus frutos. Los pumas avergonzados por todo lo que hablaron le dijeron: Gracias por la lección que nos das y por ello te nombramos jefe de todos los pumas. A partir de ese día todos los pumas se volvieron herbívoros y ese mismo amor que tenían todos, fueron enseñándolo de hábitat en hábitat a toda especie de animales salvajes para que se respeten y se amen los unos a los otros. El venado que lo desterró se entero lo que logró el puma herbívoro y se avergonzó por lo que había hecho y pidió perdón, todos los venados y su familia de crianza fueron a vivir con el puma. Pasado los años lograron que todos los animales salvajes se volviesen humildes y se juntaran con todos los herbívoros, eran muy unidos y felices. El puma que fue criado por los venados que ya era muy anciano fue nombrado rey de la selva, a los pocos días cayó rendido al suelo de cansancio y pidió como último deseo que llevaran sus restos al lugar donde fue criado. Ese día pereció el héroe puma herbívoro que unió a todos los animales salvajes y herbívoros. Dejo sembrado el amor y hasta el día de hoy todos lo comparten con toda especie de animales.