La pareja que sabe lo que es amar y valoran su Vida, respetan su tiempo, su espacio y la libertad de cada uno, generan buenas energías, las renuevan y las comparten constantemente, cumplen su deber por Amor, que es enseñar la Verdad espiritual e iluminan con su luz a todo el mundo, se mantienen jóvenes, sanos, vigorosos, son como “La luna y el Sol” que nos ilumina, tienen paciencia y esperanza de volver a estar juntos y cuando llega el día que se vuelven a reencontrar se unen en un gran “Eclipse de Amor” donde en un solo cuerpo los dos se iluminan.
La pareja que son guiados por el amor son casados espiritualmente que significa: Dios les casa por eso se aman, son fieles y respetan sus cuerpos y su libertad para cumplir una misión espiritual por Amor en esta Vida, respetan la Vida de todos, enseñan, instruyen, orientan, consuelan, defienden, ayudan, comparten, resisten las pruebas y obstáculos de este mundo, tienen la dicha de liberar e iluminar con su radiante buena Energía a todos, son felices y hacen felices a los demás para bienestar de todo el mundo en armonía con el Universo, la Madre Naturaleza y los Cuerpos Celestiales.
Lamentablemente la convivencia de una pareja común y corriente se vuelve rutina: Presiona, cansa, satura, aburre y asfixia, por eso muchas parejas en este mundo terminan separándose y odiándose.
La pareja que se caza, se esposa, se ata, se amarra y se esclaviza; ignora lo que es amar y solo quiere lo que desea.
Viven egoístamente, en medio de engaños, de mentiras, de fantasía, de ilusión, de deseos, de obsesión, de ambición, de envidia, de chismes, de criticas, de condenas, de apariencias y son completamente infelices, porque ambos se creen dueños de su cuerpo y del cuerpo de su pareja, viven con masoquismo, con celos, con apego, con obsesión, con el deseo de poseer, dominar y controlar haciendo de su pareja un títere, una marioneta o un robot, para satisfacer sus propias necesidades, ambos se esclavizan, se absorben y se roban sus energías sexualmente y diariamente, tanto así que se enferman, se envejecen, viven en medio de la oscuridad espiritual y con el tiempo la convivencia se transforma en rutina, fastidio, hostiga, etc.
Tienen rencor y amargura oprimida, se ofenden, se hieren, se lastiman, cuando uno de ellos se cansa de su pareja le es infiel a escondidas o cuando se da cuenta de su esclavitud y se quiere separar; la pareja amenaza, extorsiona y chantajea sentimentalmente para seguir cazándole como una presa y manejarle a su antojo y peor aun cuando uno de ellos desencarna o muere, se vuelve más masoquista, sufre, se auto castiga, se echa a morir egoístamente y lentamente, se olvida de amarse, vivir en paz, de hacer algo bueno por su Vida y la Vida de los demás.
Por ello es importante ampliar el conocimiento espiritual y/o energético los unos a los otros para que sepan diferenciar lo que significa: “Cazarse en este mundo” o “Casarse espiritualmente” para que acabe la esclavitud, el sufrimiento y el dolor de muchas Energías o Almas y las dejen libres para amar y compartan el Amor con todo el Universo hasta la eternidad.