¡Padre amado!
!Hoy y siempre! Estaremos agradecidos,
por su infinita paciencia y misericordia;
porque sin su Amor nada somos.
¡Gracias!
Por considerar a todos sus hijos,
uno solo y llamarnos
uno solo y llamarnos
“hijo amado”
¡Gracias!
Por darnos un hogar,
un mundo, un planeta, que
nos ama y nos provee de todos
los recursos naturales.
¡Gracias!
Por enviar a nuestros hermanos
guerreros e iluminados de
su Sabiduría Divina y
Suprema; a cuidarnos,
a consolarnos, a defendernos,
a protegernos a corregirnos
e instruirnos.
¡Gracias!
Por iluminar nuestro
camino con su luz, que nos
protege de la oscuridad.
¡Gracias!
Por calmar nuestra
hambre, con su pan de Vida.
¡Gracias!
Por calmar nuestra sed,
con su fuente de agua viva.
¡Gracias!
Por su Amor incondicional,
que nos ayuda día a día a vencer
toda adversidad y todo obstáculo.
¡Gracias!
Por darnos la oportunidad
de enmendar todos nuestros errores
y de recibirnos en su regazo.
¡Gracias!
Por darnos sus buenas
energías que nos dan Vida en
abundancia, para que todos
unidos vivamos en perfecta paz,
bienestar y armonía.
