“Nadie es dueño de nada ni de nadie”

Convénzanse que nadie ha venido a este mundo, a competir ni a consentir a nada ni a nadie. Nadie es dueño de nada ni de nadie y están en este mundo solamente, para compartir palabras de corrección, bendición, bien decir, hablar bien, actuar bien, para que eviten cometer errores y que del cero al diez, todos tienen un valor incalculable y si faltase uno nadie seria nada.

El que se crea más, será restado y el que sea restado, será multiplicado y el que sea multiplicado, será dividido. Así que nadie se crea más ni menos, porque el primero será el último y el último será el primero y nada ni nadie se crea con derecho de alterar el producto. 

¡Sabio! ¡Campeón! ¡Ganador! y ¡Vencedor! es aquel que valora, ama, respeta, cuida, defiende y protege a su cuerpo y a su sistema inmunológico y siempre genera buenas energías, buenas emociones, buenos sentimientos, buenos pensamientos y buenas acciones y todo ello lo comparte en igualdad, bienestar y armonía, para ayudar a toda la humanidad. Un alma evolucionada es aquel, que acepta que es vencedor por el simple hecho de haberse formado en el cuerpo de una gran mujer, para ser racional, por lo tanto valora, cuida y defiende a su cuerpo, porque es su hogar, su mundo, su planeta, su mini universo, y de la misma manera respeta la vida de toda la humanidad.

La soberbia, el orgullo, la vanidad y la ambición; solo han traído desgracias a este mundo.
Por desconocimiento y falta de disposición y voluntad de cambiar, de evolucionar y  de razonar, muchos prefieren vivir como los del reino animal, donde el animal salvaje se come al herbívoro; el depredador comiéndose al más débil y para colmo se hace las victimas de sus propios errores. 

Procuren apartarse lo más lejos, que puedan de los cuatro apocalípticos, que son microorganismos involucionados e irracionales oportunistas (virus, bacterias, parásitos y hongos) que gobiernan este mundo y se creen según ellos dioses con minúscula, porque eso es lo que son y nada son sin ningún cuerpo. Tarde o temprano estos entes caerán en sus propias trampas, porque viven en cuerpos transformados, en sepulcros de cadáveres, como muertos vivientes, a ciegas dando vueltas y vueltas sin ningún sentido a la Vida, porque viven en medio del deseo de poseer, el apego, la obsesión y todo lo que les auto elimina y auto extermina. Sus propias energías y sus propios errores les cobrarán con creces todas las tragedias y desastres que han causado, durante muchos siglos de siglos.

Respeten su libre albedrío de estos mercaderes de esclavos y jamás sean cómplices de sus errores, porque si apoyan todas sus fechorías, serán siervos y esclavos de ellos y les darán autoridad de hacer de sus cuerpos, un instrumento, títeres, marionetas y robots y se comportarán de igual forma que estos entes, serán masoquistas, se engañarán, se lastimarán, también transformarán y exterminarán a sus cuerpos.  

Recuerden que su cuerpo es un microcosmos dentro de un macrocosmos, un mundo dentro del Universo, que tiene un valor Divino, ya que hay Vida en abundancia y eterna, que jamás tendrá comparación con las riquezas fuera de este mundo, donde todo se corrompe y se transforma.

Cuiden y valoren su libre albedrío y hagan de su libertad todo lo bueno, todo lo amable y  todo lo perfecto.

Ámense y respétense los unos a los otros, manténganse firmes y unidos, al Espíritu de Amor incondicional y nada ni nadie los derribará, porque juntos al Padre del Universo, a la Madre Naturaleza, a los hermanos cuerpos Celestes y Angelicales, son todos poderosos e invencibles.