Ninguno es igual a otros porque todos son diferentes en su forma de proceder. Hay quienes tienen una elevada autoestima y se apartan de lo que hace daño, de lo que contamina y envenena y hay quienes ni tienen una pizca de autoestima son masoquistas, se lastiman, se dejan lastimar, humillar, pisotear y hasta exterminar.
!Es falso! decir que los hijos son el reflejo de los actos de los padres o de quien los cría porque desde el momento que cada uno sabe lo que es bueno y lo que es perversidad es libre de elegir por uno de los dos caminos. Por lo tanto cada uno es responsable de sus actos y de su vida.
Hay quienes eligen por el buen camino donde hay bondad, igualdad, bienestar y mutuamente comparten sin avaricia y sin mezquindad. Y hay quienes son incautos que se dejan manipular, dominar y controlar por entes de la oscuridad y por eso creen en lo que les conviene para satisfacer a sus instintos, impulsos y debilidades, a su propio egoísmo, a su propio beneficio, a sus propios deseos, a sus propias ambiciones, a sus propias avaricias, a sus propios negocios y a sus propios apetitos carnales.
Hay quienes se dejan guiar por la sabiduría divina del Universo y dan el mensaje tal y como es sin tergiversar ni cambiar una sola palabra. Y hay otros que tergiversan los mensajes y dicen que se debe temer a Dios. Es necesario hacer entender una y otra vez aunque parezca repetitivo y hasta que todos entiendan, que Cristo Dios (con "D" Mayúscula) es el gran Macro Cosmos, el Padre Creador del Universo, la Madre Naturaleza y cada cuerpo que es un Micro Universo, con ejércitos de defensas, que han demostrado y demuestran a diario su infinito amor, rectitud y misericordia a través de los Recursos Naturales que da abundante vida a toda la humanidad.
Dios jamás castiga ni castigará porque siempre fue amor y nunca es temor, ya que dónde dos o tres se reúnan en su nombre para brindar paz, será protegido y que tenga bien claro en su mente que Dios nunca fue religión ni pertenece a ninguna religión donde hay entes densos de la oscuridad, que se hacen llamar dioses pero (con "d" minúscula) engañan, manipulan, dominan, controlan y se lucran con la Fe de sus incautos y en estos tiempos es difícil que engañen a quiénes son libres de tanta atadura y falsedad y ninguno puede atreverse a negarlo.