miércoles, 4 de enero de 2017

Durante siglos buscan afuera la solución para acabar con tanta maldad.

Durante siglos buscan afuera la solución para acabar con tanta maldad. Porque desconocen que la única solución para vivir en paz y curar el cáncer u otra enfermedad, es tener mucho amor y misericordia por su Espíritu, alma y cuerpo, que es el mundo de cada uno donde hay millones de micro organismos, micro habitantes que desde hace mucho tiempo vienen pidiendo piedad, ya que la mayoría por necedad voluntariamente lastima y extermina a su propia sangre, a sus propias células, a sus propios órganos, a su propia energía, a su  propio cuerpo y a su propio mundo.
Y todavía tienen  la osadía de hacerse  las víctimas y se atreven a culpar a Dios (con “D” Mayúscula) de los errores garrafales que cada uno ha venido cometiendo durante miles de años y rechaza la verdad para creer en falsas creencias, falsas costumbres, falsos argumentos, falsas tradiciones y/o enseñanzas.
“La materia y la energía ni se crea ni se destruye sino solo se transforma” y por el libre albedrío que cada uno tiene de tomar sus propias decisiones, lo han confundido con libertinaje y muchos son títeres, marionetas y robots de sus propios instintos, impulsos y debilidades y es por eso que por falta de conocimiento e ignorancia inconscientemente muchos, se han estado comportando como un depredador y como una bestia salvaje más, sin importarle su vida ni la vida de nadie y han sido cómplices de tanto asesinato y holocaustos de seres humanos y animales indefensos para saciar sus deseos y apetitos carnales. Y peor aún se auto suicidan consumiendo y comiendo carnes cadavéricas en putrefacción, que son transformados en microorganismos oportunistas y patógenos (virus, bacterias, parásitos hongos etc.) que toman la revancha y venganza, provocando mil enfermedades físicas y mentales, que lastiman y exterminan las defensas de muchos cuerpos y causan la muerte de la misma manera o peor forma, que les causaron la muerte a ellos.
Nadie puede decir que es bueno si satisface deseos, ambición y apetitos carnales, lastimando y siendo cómplice de la tortura y del asesinato de un indefenso animal que también merece respeto a la vida.
Todo tiene una causa y un efecto, todo lo que se da, se recibe, toda deuda se paga, todo lo que se siembra se cosecha, todo regresa como boomerang, justos pagan por pecadores, cada quien tiene lo que merece, los descendientes  y/o parientes pagan los errores, pecados y karmas hasta la quinta generación.
De cada uno depende acabar con tanta manipulación dominio y control y para siempre, tomando conciencia y cambiando de actitud para vivir en paz sin remordimiento alguno de saber que ama, cuida, respeta, valora, defiende y protege su propio mundo y su propia vida, que a nadie le hace daño y que las deudas y/o karmas acabaron en uno porque Jesucristo (Padre, hijo y Espíritu Santo) se sacrificó y fue el último cordero en el holocausto para librar a todos del mal, para que el dios (con “d” minúscula) nunca más tenga autoridad ni se atreva a exterminar a ningún cuerpo, que es el mini mundo, mini universo de cada uno para cuidarlo como la mejor herencia testamento y riqueza más valiosa y aprender a respetar el mundo individual de cada uno para acabar con todo sufrimiento, con toda angustia, con todo dolor, con toda agonía y con toda perversidad.
Quien tenga ojos, que vea, quien tenga oídos, que oiga y quien tenga entendimiento, que entienda lo que el Espíritu de Dios dice para ser feliz vivir en paz y transmitir esa misma paz a toda la humanidad y a todo lo que les rodea en armonía con el Universo y con la Madre naturaleza que les brinda todos los recursos naturales para que lo compartan los unos a los otros incondicionalmente.