viernes, 11 de enero de 2013

La Verdad es la Verdad, duela a quien le duela.


Cada uno con sus acciones erróneas juzga, condena y auto extermina a su propio mundo. Decir la verdad nunca fue ni es ser feminista. La Verdad es la Verdad, duela a quien le duela.
La Verdad es como un látigo que duele pero corrige y despierta a quienes aun les falta despertar e iluminar su mente porque son marionetas, títeres y robots de sus propias energías y acciones erróneas.
Cada ser humano es Espíritu, alma y cuerpo juntamente con todo su sistema inmunológico y por ello es un mundo individual. Por ello cada uno es responsable de lo que respira, huele, come, bebe, mira,  oye,  habla y hace; por eso es que cada uno debe procurar controlar y corregir a sus energías confundidas, a sus instintos, a sus impulsos y a sus debilidades para tener buenas energías, buenas emociones, buenos sentimientos, buenos pensamientos y buenas acciones que brinden palabras de bendición, de corrección, de paz para que gente tóxica que contamina y envenena la atmósfera con sus acciones erróneas se dejen de apariencias, hipocresías,  de envidiar, de ofender, de calumniar, de robar, de estafar, de secuestrar, de violar, de exterminar, de asesinar, etc Y sobre todo  para que dejen culpar a Dios de todo lo que sucede en el entorno.
Cada uno tiene libre albedrío para hacer de su libertad un mundo mejor que brinde paz a los demás mundos y la gente tóxica deje  de hacer la guerra a quienes viven en paz y deje de  buscar culpables de sus propias acciones erróneas.
Los maestros en lugar de enseñar tanta violencia pasada que fomenta tanta revancha y venganza deberían de brindar una buena enseñanza de autoestima, valores, respeto, etc. a cada uno de sus alumnos, así habría mejor calidad de personas que amen y valoren a su Espíritu, alma y cuerpo que es su propio mundo y transmitirían mucha paz a los demás mundos y ganarán la batalla de vencer tantos conflictos y guerras.
Toda competencia, conflicto o guerra nunca se podría llamar ganancia ni arte porque por causa de ello hasta el día de hoy muchos inocentes están pagando las estupideces que hicieron sus antepasados y por ello hay mucho odio, amargura y resentimiento.  
Mejores son todos por el solo hecho de ser humanos racionales y evolucionados, que razonan gracias al Amor de Dios. Por una simple competencia o un concurso nadie debe pretender desmerecer a otros porque cada uno hace el mayor esfuerzo por dar de si lo que lleva dentro de sus mejores sentimientos, aunque no tenga mucha cátedra, técnica, o una gran voz ni sea un gran tenor lo que vale es sentir e interpretar de corazón y con Amor el don que Dios les dio a cada uno.
Dios es justo y si una persona triunfa y prospera, bien por ello y muchas bendiciones porque todos están en este planeta para compartir Amar, corregir, dar paz, alegría y mucha felicidad en armonía con todo y con todos.
Quien tiene el Amor del Espíritu de Dios, aprende a corregir y a enmendar sus propios errores y es por ello que deben ser corajudos y valientes para hacer ver los errores a otros para que dejen de hacer la guerra a su propio mundo y aprendan a vivir en paz en armonía con Dios.
Dios es Amor y jamás juzga ni condena ni extermina a nadie y hace mucho tiempo que dio libertad y Vida en abundancia a cada mundo para ser feliz e irradiar buenas energías para dar Amor, paz y alegría para que los unos a los otros vivan en perfecta armonía.