En un mundo mágico lleno de Amor, Verdad, Perdón y Vida, vivían muchas hadas. Un cierto día, decidieron reunirse, para buscar soluciones, como seguir contribuyendo con el Universo, con la Madre Naturaleza y con sus hijos Valientes Guerreros del Amor. Una de las hadas, adultas dijo: He decidido que todas las hadas, vayamos a cada mundo y dejemos ocultas nuestras varitas mágicas en el árbol de la Vida , para el día en que los seres inhumanos, decidan voluntariamente evolucionar y razonar, que son humanos y evolucionados, el árbol de la Vida les dará la varita mágica, para que los ilumine y los guíe hacia nosotras, para que vivamos juntos para siempre. Una de las hadas joven dijo: Estoy de acuerdo con el hada adulta, porque ellos necesitan un aliciente y saber lo mucho que les amamos y la varita mágica será la prueba de nuestro Amor. Otra de las hadas que era adolescente dijo: Cuenten con mi ayuda, porque es necesario, que ellos sepan que son hadas, como nosotras y solo las varitas mágicas se lo harán entender. Una de las hadas niñas dijo: estoy completamente de acuerdo con todas mis hermanas, ya que las varitas mágicas, les ayudará a dejar de ser transformados en especies inhumanos y podrán recuperar la pureza, que les renovará de Amor y así podrán regresar aquí, donde los esperamos con los brazos abiertos, para todas juntas presentarnos a nuestro padre del Universo, a nuestra Madre naturaleza y a nuestros hermanos Celestiales y Angelicales. Una de las hadas ancianas dijo: Detenidamente, las escucho a todas y no estoy de acuerdo con ninguna, porque yo soy la más anciana, tengo más experiencia que todas, un tiempo pensé igual que uds. visite muchos mundos y ninguno de los que viven ahí, tiene remedio, porque son seres revanchistas, egoístas, envidiosos, masoquistas, necios, salvajes y depredadores, que se comen los unos a los otros y transforman sus mundos en cuevas y sepulcros de cadáveres. Peor aun, estos son transformados en fenómenos vengativos, que disfrutan del dolor y del sufrimiento, por ello es que arrasan, lastiman y exterminan vilmente a cada uno ellos. Nosotras no podemos arriesgar a nuestras varitas mágicas, dejándolas con esos seres inhumanos, porque las transformarían igual que ellos y peor aun, todos los mundos mágicos del Universo serian transformados y nunca más sabríamos que es vivir en paz y en armonía. Otra de las hadas ancianas dijo: Escucho lo que dices hermana y la verdad que me quedo sorprendida de lo que hablas, porque yo como tú también tengo la misma experiencia y viví en muchos mundos donde vi y palpe el dolor y el sufrimiento de seres inocentes, que sufren por causa de los errores de otros. Los seres inhumanos depredadores, son pocos y son muy astutos, para esclavizar, dominar, controlar como títeres, marionetas y robots a muchos mundos, porque también ignoran que son hadas, igual a nosotras y de su cambio voluntario depende, dejar de ser transformados, de sufrir y de hacer sufrir. Yo si estoy de acuerdo, que vayamos ahora mismo y dejemos las varitas mágicas, así cuando los seres inhumanos depredadores, las encuentren, inmediatamente sabrán su origen y así intenten transformar a las varitas mágicas, jamás lo podrán hacer, porque viven interconectadas “Al Amor, a la Verdad , al Perdón y a la Vida ”, serán valientes y también se sacrificarán, para renovar al temor, al engaño, al odio y a la muerte y les demostrarán a todos los mundos que nuestro Dios padre del Universo, nuestra Dios Madre Naturaleza y nuestros hermanos Dioses les tienen paciencia, piedad y misericordia, porque respetan su libre albedrío, y esperan que algún día ellos tomen la decisión correcta, para que todos vivan felices en igualdad, bienestar y armonía. Todas las hadas aplaudieron al hada anciana y bondadosa y la anciana confundida dijo: Pido ¡Perdón! por Las palabras que salieron de mi boca, porque después de haber escuchado a mi hermana, me di cuenta, que yo también me estaba comportando como uno de los seres inhumanos, en lugar de ser un ejemplo, comprenderlos y tenerles paciencia como nuestros Dioses padres y como nuestros hermanos Dioses, que diariamente se sacrifican y los ayudan, por Amor. Todas las hadas se abrazaron amorosamente y fueron a todos los mundos, a dejar ocultas sus varitas mágicas en el árbol de la Vida y regresaron de nuevo al mundo mágico llenas de Amor, Verdad, Perdón y Vida.