jueves, 3 de diciembre de 2020

Fácil es buscar a quien culpar.

 Son contaditas las personas que reconocen su error y se enmiendan para ser mejor persona...

Quien reconoce que se equivoco y enmienda su error se libera de esas energías negativas y nunca se deja atar, manipular, ni dominar ni controlar como siervo, ni titere, ni marioneta ni robot...
La mayoría se hacen las victimas y buscan a quien culpar y chantar sus errores, sus injusticias y sus perversidades...
Son incapaces de reconocer que se equivocaron y ni lo aceptan por nada y menos quieren enmendarse y por ello siguen en lo mismo cometiendo error tras error...
Fácil es buscar a quien culpar...
Siempre alguien propone y el otro dispone por lo tanto quien dispone es causante de lo que suceda...
Quien niega y tapa sus errores, sus injusticias y sus actitudes negativas es alguien capaz de hacer las peores cosas porque permite que energías involucionadas entren y conduzcan la mente y eso mismo puede hacer atrocidades y llevar el abismo al cuerpo...
E ahí el porque se tiene que tener en cuenta la gravedad que es ser un mitomano y cínico que niega los errores, injusticias y/o perversidades que ha cometido o comete...
Nunca se debe ser cómplice de energías involucionadas que se meten a la mente a cometer errores garrafales porque ni saben conducir y se comportan como animales irracionales y hasta como bestias salvajes depredadores y exterminadores...
Uno mismo tiene que analizar y darse cuenta de las actitudes negativas que puede estar cometiendo y debe poner orden en su vida y ser muy valiente para sacar y echar lo que está dando mal ejemplo o mal testimonio de su verdadera personalidad de ser un humano racional y pensante que tiene mucho respeto al Espíritu, Alma y Cuerpo que le fue encomendado y prestado a un Alma para amar, cuidar, educar, instruir, corregir, valorar, defender y proteger.