Una
y otra vez se repetirán los mismos mensajes para que entiendan que cada uno
tiene libre albedrío, que es libertad para hacer todo lo bueno, todo lo
agradable y todo lo perfecto de su mundo y de su vida para vivir en paz con
todo lo que le rodea.
Entiendan
que nuestros hermanos menores que son toda especie de animales también tienen derecho a vivir. Quien ignore y
se haga el desentendido de estas palabras y orientación y siga siendo participe
y cómplice de tantos holocaustos y
asesinatos de todo ser humano, sabiendo
que la materia y la energía solo se transforma, sentirán en carne propia lo que
le hicieron a toda especie de animales porque atrasaron su evolución y fueron
transformados en microbios implacables, oportunistas, revanchistas y vengativos
que atacarán sin piedad a justos y pecadores para hacerles sentir el mismo
dolor y angustia que sintieron al asesinarles. Así que ya saben quien quiera
hacer de su cuerpo y de su propio mundo un sepulcro de cadáveres, que son como
zombis andantes que andan buscando a quien devorar, se les pide un gran favor
que jamás busque a quien culpar de sus errores, de sus pecados y de sus
acciones erróneas porque voluntariamente decidirá, lastimar y exterminar a su
propio mundo y a su propia vida porque nadie le va obligar ni exigir a cambiar
porque la evolución y/o el cambio es voluntad y decisión de cada uno.
Cada
uno de ustedes tiene dones y una personalidad definida para hacer lo mejor y
sobre todo hacer lo que el Espíritu de Dios les guía para corregir a quienes
aún hacen maldades y perversidades y consolar a quienes sufren por causa de los
errores de otros.
Para
vivir feliz y en paz debe mantenerse el equilibrio y quienes lo desequilibran
aprendan a respetar sus palabras, sus acciones y la vida de quienes luchan por
la paz mundial.
A
gente tóxica se le debe llamar la atención y corregir constantemente, porque
son entes involucionados, que se comportan como bestias salvajes buscando a
quien devorar y son como víboras que andan buscando a quien envenenar con sus
chismes, ofensas, calumnias e hipocresías. Por eso jamás callen su sentir y
manden a esos entes tóxicos directo al abismo infernal que es el lugar que les
corresponde.
Así
como se llenan de alimentos materiales también tienen el deber moral y la
responsabilidad de alimentarse de lectura para elevar la autoestima que es Pan
de Vida y es alimento espiritual.
Tener
la bendición y la dicha de estar rodeados de seres espirituales es la mejor
riqueza que pueden tener porque esos seres bondadosos generan buenas energías y
les brindan gratuitamente y sin condiciones abundante vida a toda la humanidad.
Un
ser bondadoso y espiritual siempre enseña, educa, instruye, corrige, consuela,
apoya, ayuda y jamás abandona ni exige ni obliga porque su amor es
incondicional y espera la voluntad y la decisión que cada uno aprenda a amar
igual.
El
Espíritu de Cristo habita en cuerpos iluminados de mucha bondad, rectitud, paz
y misericordia, por eso son muy valientes y corajudos porque defienden y
protegen su mundo y el mundo de quienes también valoran su vida.