lunes, 17 de agosto de 2020

Ninguno es dueño de nadie ni de nada.

 Ninguna persona buena es aceptada como profeta en su propia tierra y/o hogar porque hay gente tóxica y envidiosa que hace la guerra y ataca desde que está formándose en el vientre de una madre para impedir que se libere a tantos átomos, células, energías y/o almas ... Es una cruda realidad...

Es una bendición que aun nazcan seres humanos del Espíritu y se les reconoce porque son personas de nobles y buenos sentimientos que brindan paz, irradian alegría y generan buenas energías desde que están dentro de un cuerpo y/o micro universo iluminado de bondad...

Aunque sea doloroso reconocer quien es quien, es justo y necesario hacerlo para empezar a separar lo bueno de lo perverso así evitaran atrasar, envenenar y contaminar el micro universo y micro habitantes que les fue encomendado y prestado...

Es muy doloroso para algunos aceptar la verdad y tener que desprenderse de quienes aman porque jamás se puede exigir ni obligar a sentir amor, paz, alegría, fe, paciencia, bondad, amabilidad, humildad y dominio propio a ninguno porque todos son libres de tomar sus propias decisiones ya sea para bienestar de si mismo o lo contrarío...

Un padre, una madre, un hermano, una pareja, un hijo, un familiar, un pariente, una amistad y/o un conocido es un alma y es como un ave de paso en el camino de cada uno porque ninguno es dueño de nadie ni de nada...

Cuando cada uno conoce la verdad y acepta que es libre de toda karma, atadura, cadena, manipulación, dominio, conttol, egoísmo, egocentrismo, egolatria, envidia, deseos, apegos, caprichos, obsesión, obstinacion, fascinación, alucinación, fantasías, ilusión, etc, etc,... puede sentirse dichoso y feliz porque ha recibido de corazón a un Espíritu de Amor, poder y dominio propio que le guiará al camino de total libertad para formar parte de la obra y labor universal...

Son contados los obreros en la obra y labor universal por eso la carga cada día es muy pesada para el cuerpo, el micro universo, el hijo amado de Cristo Dios Padre del Universo y de la Madre Naturaleza...

Hay muchos seguidores, adeptos, siervos, esclavos, títeres, marionetas y robots de legiones de falsos dioses explotadores con diferentes nombres y calificativos, que son entes y engendros demoníacos de la oscuridad, que hacen la guerra y compiten entre ellos para crerse lideres de otros para seguir gozando de placer, saciando su hambre, su sed, sus apetitos carnales, sus deseos, sus vicios, sus propios beneficios, sus propias conveniencias, etc... a costa del sufrimiento y del dolor ajeno...

Esa gente es tóxica porque ha transformado el cuerpo que le fue prestado y encomendado, en una tumba de muertos andantes, en un sepulcro de cadáveres que son microorganismos oportunistas (virus, parásitos, bacterias, hongos, etc) que son vampiros, depredadores y exterminadores que atacan sin piedad a ejércitos de atomos, células, órganos, energías, etc, para transfornarles en un engendro demoníaco más...

En cada película, serie, novela, teatro, etc. Se esconde un mensaje para todos y de cada uno depende descubrirlo para compartirlo y hallar soluciones como protegerse de tanta perversidad...

Cada uno puede cortar con toda atadura y así podrá evitar que se haga realidad afuera todo lo que sucede adentro de cada micro universo con los micro habitantes...

Todos tienen que aprender a respetar las decisiones de otros sin molestarse, sin hacerse las víctimas ni buscar a quién culpar...

Por peores cosas han pasado muchas almas buenas y ninguno les ayudó mas bien necesitaron de ellas y muchos ni siquiera se lo agradecieron... Y jamas culpan a nadie porque solas decidíeron ayudar a gente que ni se lo mereció...

Quién lo supo valorar bien por ello y quien no que suceda lo que tenga que sucederles porque así lo decidieron y asi lo quisieron...

Ejércitos de buenas almas ya cumplíeron con todos y se van felices y en paz...

Leyendo buenos libros, escuchando o viendo buenos mensajes, vídeos de temas de auto ayuda y de autoestima se levanta las defensas y se vence toda enfermedad porque es alimento espiritual que vence hasta la misma muerte.