domingo, 11 de mayo de 2014

El Espíritu de Dios siempre cuida, corrige, previene y advierte.

El Espíritu de Dios siempre cuida, corrige, previene y advierte de la trampa que tienden microbios y entes tóxicos oportunistas que esclavizan y habitan en cuerpos que son abismos infernales.
Quien jamás lee ni se alimenta de pan que da vida y mucho menos pone en práctica lo que lee es pobre de espíritu porque le falta autoestima y permite que hagan de su cuerpo un títere, marioneta y robots para ser manejado sin control alguno. Por eso cada día muchos cuerpos son lastimados y exterminados vilmente y sin piedad.
Las personas buenas pagan los errores de otros y a veces son juzgados injustamente y es porque desconocen e ignoran que por causa de gente necia, burlona, terca e injusta, seres espirituales se sacrifican para que sean libres de toda atadura.
Las dudas y la preocupación bloquean el entendimiento.
Echen afuera todo lo que intente perturbar la razón, tengan  Fe y valoren al Espíritu, alma y cuerpo que batallan día a día por defender y proteger cada mundo.
Cuando cada uno entienda que tiene el deber moral de valorar a su Espíritu, alma y cuerpo para que haga de su cuerpo un Reino de los cielos para que tenga abundante vida, también ira con valentía y coraje  a defender y liberar a los demás mundos.
Quien ama exactamente como el Padre del Universo, como la Madre Naturaleza y como los hermanos Celestes, Angelicales y Espirituales, jamás condiciona, ni tiene deseos, ni apegos, ni obsesión y menos abandona al ser amado cuando más le necesita.
Muchas personas estuvieron al borde de perder su vida, pero la Fe y la confianza en Dios es más fuerte y poderosa que vencieron a la muerte y por ello siempre vencerán porque tiene  un Espíritu de poder, de amor y de dominio propio.
Muchos han creído que se encuentran solos, cuando nunca lo estuvieron porque el Espíritu de Dios jamás abandona a sus hijos; los errores que cometen diariamente los aparta del amor de Dios.
Pocos son humildes aceptan, razonan y entienden las enseñanzas de Jesucristo, y muchos prefieren escuchar o leer lo que les conviene porque se encierran en su mundo de necedad y de oscuridad.
Quien casa, con “Z” domina, manipula, controla y ata los sentimientos, y también quiere atar los sentimientos de otros. Quienes están unidos y casados al amor del Universo y la Madre Naturaleza serán libres de toda atadura y esclavitud.
Quien tiene el amor de Jesucristo se casa con su Espíritu, alma y cuerpo para ir  a rescatar a muchos que fueron cazados, atados, oprimidos y esclavizados en medio de la oscuridad.
Quien tiene alta autoestima, valora su propio mundo y ama su vida por eso jamás se deja engañar, ni oprimir, ni conquistar, ni cautivar, ni casar con “Z”, ni manipular, ni dominar, ni controlar por entes tóxicos oportunistas que intoxican, envenenan y contaminan a toda la humanidad para exterminarles.
¡Todo tiene una causa y un efecto!

Si se sigue cometiendo errores cada uno puede perder todo y hasta la vida, tengan presente ello para evitar lamentos y mucho menos se hagan las victimas ni se atrevan a culpar a Dios de sus desgracias.