Por eso los que sienten Amor y misericordia por sus
hermanos y son humanos racionales y evolucionados permanezcan unidos en un solo
sentir para que el Espíritu del Amor y poder que habita en sus cuerpos les de la
suficiente fortaleza, valentía y coraje para que se enfrenten y corrijan a los
que están ciegos Y sordos de entendimiento espiritual, para que recapaciten del
daño que están haciendo a su propio cuerpo, a su propia vida y a todo lo que
les rodea.
Están aquí para demostrar que son seres evolucionados y
racionales para corregir y dar paz a su propio mundo y esa misma corrección y
paz transmitirla a los demás mundos. Cuiden
su Vida, den paz a su cuerpo que es su propio mundo para irradiar buenas
energías que de paz a todos los mundos en armonía con el Amor.
La dicha que deben sentir es que diariamente tienen un
eclipse de Amor, ya que sus energías constantemente se unen al Espíritu de luz
que les ilumina y es la mejor unión que todos pueden tener porque aun a la
distancia unos a otros cuidan, respetan, valoran, defienden y protegen a sus
cuerpos que son templos y Reinos de Dios para que siempre tengan abundante Vida
y la compartan con mucha paz.
Cada uno sea fiel a su cuerpo y esa misma
fidelidad la transmitirán a la pareja que elijan como compañía para que ambos
sean imagen y semejanza de un Dios de Amor y todos aprendan lo que es amar y
ser amados.
Los cuerpos que son reinos del Amor necesitan vivir en
perfecta paz para que puedan seguir generando buenas energías que ayuden al
Espíritu de Dios para que siga dándoles Vida en abundancia a todos.
Un reino iluminado es como una mujer embarazada que debe
tener mucha paz para poder dar a luz a un hijo lleno de Amor y con radiante
Vida.
Dios es Amor, corrección
y misericordia.
¡Ojo! Corregir es distinto a castigar ya que el espíritu
corrige con poder y autoridad con palabras sabias e iluminadas para que corrijan sus errores y las
enmienden para que vivan en profunda paz.
Cada uno con sus acciones erróneas, castiga y
extermina a su cuerpo que es su propio
mundo.
Cada vez que puedan oren, hablen y corrijan con coraje y
valentía a los que están en medio de la oscuridad comiéndose unos a otros para
que recapaciten y se den cuenta del daño que se hacen así mismos y que dejen de
culpar a nuestro Padre del Universo y a nuestra Madre Naturaleza de todo lo que sucede en todo el planeta y en el
entorno.
Están unidos a un Espíritu de Amor, poder y dominio
propio, que les da su fortaleza para que puedan superar y enfrentar a toda
prueba, a toda tentación, a toda debilidad, a todo instinto, a todo impulso, a
toda enfermedad, a todo síntoma, a todo malestar, a toda adversidad, a toda
barrera, a todo problema, a todo obstáculo, a todo conflicto, a toda
guerra, a toda tragedia y a todo
desastre.
Ya nada ni nadie podrán amilanarles porque hace mucho
tiempo que el Espíritu del Amor, de la Verdad , del perdón y de la Vida que habita en cada uno
de Uds. ha vencido al temor, al engaño, al odio y a la muerte.
Dios les dejo sus pergaminos para que hagan de su cuerpo
un camino de luz y de cada uno dependerá hacer de su mundo un destino de Amor.